sábado, septiembre 10, 2011
Letras
Así, poco a poco, se desgastan las miradas sobre un porvenir que no acaba de llegar.
Así, como lluvia de abril pero en septiembre, las horas se terminan cada vez más pronto y duelen.
Así, desde la tarde roja hasta el azul del día siguiente, la memoria se ocupa de uno mismo y sus fantasmas, reptando al revés en las mejillas las lágrimas de siempre.
Pero también así, no se agotan las palabras ni sus letras ni mi hastío... pero tampoco mi cariño.
No se acaba lo de dentro. El amor no acaba.
Blas Torillo.
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2 comentarios:
Qué curioso que pasara a saludar luego de tanto tiempo (¿meses? ¿años?) y me encontrara con estas palabras.
"No se acaba lo de dentro"; y lo de dentro mío, precisamente ahora, es recordar cuando estuviste al leer mis palabras. Y cuando yo estuve, al leer las tuyas.
Un gran abrazo en este día donde la memoria se ocupa de mí y me lleva a estar nuevamente.
Estimado amigo, tanto tiempo que no nos comunicamos! ¿Cómo son las cosas en ese lado del Atlántico? ¿Y cómo está tu familia? Un fuerte abrazo!
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